Cuando llegamos a Londres pude ver que es una ciudad muy bonita, tiene edificios impresionantes, el hotel me pareció bastante cómodo y era muy grande las habitaciones estaban bastantes limpias lo que no me gustaba es que allí en Londres el suelo de las habitaciones y pasillos de los hoteles tienen alfombras, el primer día nos pegamos una panza de andar que nos dieron agujetas a todos, hubo muchas critica hacia el restaurante que cenábamos y en verdad era para tener criticas siempre que llegábamos teníamos que esperar media hora en la calle esperando a que salieran unos señores que estaban allí de negocios, después de cenar siempre volvíamos al hotel muy cansados, nos duchábamos todas las noches a las 11 de la noche y después bajamos a la puerta del hotel en pijamas. Me acuerdo que una noche iba bajando unas escaleras deprisa y me hice daño en un dedo se me puso muy finchado pensé en llamar a alguno de mis profesores pero el hinchazón se me fue pasando y no fue para tanto. la comida no me gusto mucho y menos la de aquel restaurante en el que cenábamos todas las noches en el medio día cada uno se iba a comer donde quería y mas o menos la comida se podía comer pero en verdad la gente que ya había ido a Londres ya me habían advertido que la comida en Londres no es que se muy buena por lo menos para mi gusto, tampoco me gusto nada el frío que hacia allí pero bueno recomiendo a la gente que vaya a ir a Londres que se lleve ropa de abrigo. Yo pensaba que lo iba a pasar mucho mejor pero la verdad es que es una experiencia inolvidable.
